Hoy en el blog os traigo la entrevista al autor Jose M. Torres sobre su libro Los ladrones de la noche , el cual encontraréis reseña en el blog. Con esta entrevista conoceréis mejor al autor. Espero que os guste :)
La inspectora Ane García no está pasando por su mejor momento personal cuando sus vacaciones se ven interrumpidas: se ha producido un horrible crimen en un viejo convento abandonado situado a las afueras de Cañamero. Acompañada de Cosme, Jorge y la recién incorporada Cleo inician una investigación que los llevará a indagar en unos hechos ocurridos durante el Franquismo. Descubrirán secretos ocultos durante muchos años y que va siendo hora de que salgan a la luz. Un viaje al pasado donde destaparán una terrible historia, con un final que dejará al lector con el corazón en un puño.
¡Hola, José Manuel! Cuéntanos algo sobre ti.
Hola. Me llamo José
Manuel, soy programador informático y en mis ratos libres leo y escribo. Siendo
sincero, hasta los 23 o 24 años no había leído ningún libro. Lo que había leído
hasta entonces eran las típicas lecturas que te obligaban en el colegio o instituto.
Me inicié en la novela negra porque un buen amigo me recomendó la Trilogía
Millenium, de Stieg Larsson. Al principio, no me enganchó mucho, pero leídas
150 páginas la historia empezó a seducirme y no pude parar de leer. Desde
entonces, las novelas policíacas forman parte de mi librería particular.
Libros aparte, me
gusta mucho el mundo de la fotografía, que, combinado con las salidas a la
naturaleza, es una bonita manera de disfrutar de nuestro entorno. Ahora porque
con la situación del coronavirus estamos más limitados, pero en condiciones
normales es raro el fin de semana que no estoy moviéndome de un sitio a otro
con mi cámara fotográfica.
Como lector, ¿cuál es tu autor favorito?
Como el género que más
me gusta es la novela negra, sería casi un delito no decirte que la reina es
Agatha Christie. He leído varios libros de ella y sabía muy bien tapar al
asesino, hacer que no levantaras sospechas de él o ella y que te quedaras con
la boca abierta al cerrar la novela.
Otros autores de la
actualidad que me gustan mucho son Camilla Läckberg, Julio César Cano o Joël
Dicker. Es más, mi libro favorito de novela policíaca es La verdad sobre el caso Harry Quebert,
de este último.
Si tuvieses que cenar con un personaje de ficción de un
libro, ¿con quién lo harías?
Sin duda, con el
inspector Monfort. Es el protagonista de los libros de Julio César Cano y me
cae bien, a pesar de sus formas y métodos para resolver algunos casos. A veces,
cuando leo, pienso «yo
lo habría hecho como tú, inspector».
Además, tiene un carácter en el que a veces me veo reflejado. Quizás sea por
eso por lo que me gusta mucho cómo escribe Julio César Cano, ya que es una
lectura cercana a la realidad y donde a los personajes les pasan cosas que nos
podría pasar a cualquiera.
¿Por qué decidiste ser escritor?
Soy una persona que
según va leyendo imagino cosas. Centrándonos en la novela policíaca, todo el
rato voy pensando: «creo
que esto fue así», «puede que sea esta persona por tal
motivo», etc. A veces acierto y otras
no. A raíz de esto empecé a escribir historias cortas en mi blog personal con
ideas acumuladas de las lecturas que hacía. Me leía poquita gente al principio
y siempre me decían que por qué no me lanzaba a escribir un libro, que valía
para ello. Tras pensarlo mucho, empecé a ampliar una de estas historias hasta
que llegó mi primera novela. Luego, el resto han venido rodadas.
¿Qué manías tienes a la hora de escribir un libro?
Más que manía es una
ley que me impongo a mí mismo. Intento que los capítulos tengan como mínimo
diez páginas. Esto lo hago porque si dejo alguno con algo en el aire, con
cierto misterio o intriga, quiero que el lector pase varias páginas hasta que
se resuelva. La mayoría de las veces lo logro, incluso, algunos capítulos
tienen hasta 25 o 30 hojas.
¿Qué sentiste la primera vez que viste publicada tu
primera historia?
La sensación fue la
misma que la sentida cuando eres niño y abres los regalos de Reyes Magos.
Porque cuando recibes tus novelas en casa, todas vienen en una o varias cajas y
tocar abrirlas. Lo hice con una ilusión tremenda porque era el resultado de
muchas horas delante del ordenador escribiendo y revisando. Y esas emociones no
cambian novela tras novela. Permanecen intactas en todas ellas.
En Los ladrones de la noche, la localización principal es
Cañamero, que es tu pueblo natal, pero si tuvieses que haber elegido otra para
la novela, ¿cuál hubiese sido?
Me alegra que me hagas
esta pregunta. Hace un año aproximadamente pensé que tenía que escribir al
menos una novela ambientada en el casco histórico de Cáceres, que es el mejor
conservado de España y el tercero de Europa. Sus estrechas calles empedradas,
los edificios medievales o las múltiples torres dan mucho juego a la hora de «cometer un asesinato» y que los agentes las recorran
buscando pruebas. No será la siguiente novela porque ya tengo elegida una
ubicación distinta, pero, tarde o temprano, Cáceres será el lugar que aparezca
en mi libro.
¿Cómo fue el proceso creativo de la novela?
Hace unos años, en una
de estas salidas turísticas a conocer mundo, descubrí un convento abandonado
(es el de la foto de la portada del libro) en Valverde de Leganés (Badajoz).
Estuve haciéndole fotos y ahí empezó a fluir mi imaginación y a pensar que era
ideal para una novela negra. Cuando empecé a escribir Los ladrones de la
noche cogí prestado este convento a los valverdeños y lo trasladé a las
inmediaciones de Cañamero (Cáceres).
Luego, las ideas
llegaban en cualquier situación de la vida cotidiana: en el trabajo, en casa, a
la hora de irme a dormir o, incluso, mientras nadaba. Me las apuntaba
rápidamente para que no se me olvidaran y más adelante las acoplaba a la
historia.
Mi personaje favorito ha sido Ane porque es de la que más
he sentido emociones. ¿Cuál era tu personaje mimado de la trama?
Coincido contigo con
el personaje de Ane. Al fin y al cabo, ella es la protagonista principal de la
novela y en la que más empeño he puesto a la hora de desarrollar su
personalidad, sus emociones y las cosas que le pasan en su día a día.
También le tengo mucho
cariño al personaje de Eduardo, que tiene muchas cosas de un gran amigo mío: es
terco, muy testarudo y vago, pero con un buen corazón.
¿Qué hay de José Manuel en la historia?
Muchas de las cosas
que pasan a los personajes me han pasado a mí. Algunas se pueden contar y otras,
no ja, ja. Y no solo a mí sino a gente de mi círculo de confianza. Un ejemplo:
hace un par de años estaba con unos amigos en un parque pasando la tarde. Se
nos acercó un anciano de 81 años y comenzó a contarnos chistes verdes. Y no
conforme con eso, siguió dándonos consejos sexuales. No dábamos crédito a lo
que nos estaba pasando. Eso es algo que tenía que aparecer en la novela sí o
sí.
También hay otras
anécdotas que me han ocurrido, como cuando una amiga llamó a Bruce Springsteen
de la siguiente manera: Bruce Springking. Igualmente, está recogido en la
novela.
¡Gracias! :)
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